El Ayuntamiento de Dénia someterá a votación en el pleno ordinario del jueves 31 de julio la prórroga, por un año más, de la suspensión cautelar de certificados de compatibilidad urbanística y licencias para nuevas viviendas de uso turístico en el casco urbano. La medida, que se aprobó por primera vez en agosto de 2024, excluye las zonas de Les Marines, Les Rotes y el Montgó, y tiene como objetivo principal proteger los barrios residenciales de los efectos de la masificación turística.
El equipo de gobierno trabaja ya en la elaboración de una ordenanza municipal que regulará la concesión de nuevas licencias, con criterios basados en el estudio encargado a la Universidad de Alicante, que propone limitar entre 30 y 50 plazas turísticas por cada 100 habitantes en el centro urbano. Este será el punto de partida de la nueva normativa, que estará lista antes de que finalice el año.
La semana pasada, el alcalde Vicent Grimalt, el vicealcalde y concejal de Vivienda, Rafa Carrió, y la concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, se reunieron con el secretario autonómico de Turismo, José Manuel Camarero, para coordinar las actuaciones entre el Ayuntamiento y la Conselleria. Camarero informó que en Dénia se han dado de baja 800 viviendas turísticas por no haber corregido las deficiencias exigidas, y que actualmente hay otras 400 en periodo de subsanación.
La prórroga aprobada entrará en vigor el 12 de septiembre. Además, tras el verano, la concejalía de Territorio convocará una reunión con representantes del sector, a través de la asociación AEHTMA, para explicar los detalles de la nueva ordenanza.
Según Ripoll, la intención es clara: poner límites a la expansión de las viviendas turísticas dentro del casco residencial, “donde las molestias y los problemas de convivencia son evidentes”. No obstante, recuerda que, aunque el Ayuntamiento puede regular por ordenanza, la competencia para controlar y sancionar recae en la Conselleria.
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